Nuevamente los residentes de pediatría del país fuimos invitados a participar en el III Congreso Nacional de Residentes de Pediatría, a cargo de la Sociedad Colombiana de Pediatría. En esta oportunidad, el punto de encuentro fue en la hermosa ciudad de Medellín durante los días pasados 28 y 29 de abril, en el Centro de Eventos El Tesoro, donde de manera acogedora y afable estuvimos viviendo una experiencia enriquecedora, académica, participativa e interactiva. Tuvimos la gran oportunidad de compartir, conocer, explorar, participar y arriesgarnos en cada reto presentado, disfrutando cada momento para avanzar en la búsqueda de nuestros sueños, el más grande de ellos: ser pediatras.
No imaginamos lo grandioso que sería volver a vernos enfrentados en un desafío en cada sesión del congreso, ya que este año la modalidad principal de todas las charlas dadas fue la de tipo talleres teórico-prácticos, en los cuales se iban resolviendo casos clínicos diversos y se desarrollaba la temática de una forma innovadora, clara, precisa, concisa, fácil de recordar y muy creativa. Además, todos los ponentes estuvieron a la altura de sus conferencias y de la importancia de la temática a tratar, dándonos la oportunidad de conocer a grandes maestros, asombrosos profesionales y sobre todo maravillosos seres humanos, quienes nos enseñaron a cada instante lo increíble de esta profesión y las herramientas para salvar las vidas de nuestros pequeños. Las temáticas presentadas estuvieron distribuidas en los talleres de vacunas, cardiología, neumología, endocrinología, neonatología, nefrología, nutrición, enfermedades infecciosas y otorrinolaringología. Asimismo, tuvimos simposios auspiciados por la industria a nivel nacional, con ponencias muy pertinentes como inmunomoduladores y tamizaje de enfermedades huérfanas, entre otras.
Se vivieron momentos de presión, satisfacción y celebración con cada pregunta y con cada ranking tan emocionante como si estuviéramos en el concurso más importante del mundo, a través de una competencia sana, llena de amor y sabiduría. Recalcamos la excelente metodología usada en cada taller, donde por medio de la herramienta tecnológica ‘Kahoot!’, todos pudimos participar en cada ronda de preguntas y en los casos clínicos, en los que hubo un estímulo a los tres primeros puestos ganadores, por lo que existieron aún más razones por las que celebrar. Volvimos a ser compañeros de clase, sin importar nuestra procedencia.
El famoso dicho se comprueba una vez más en estos eventos: “Hay que arrepentirse es de lo que no se hace, no de lo que se hace”, ya que si nos ponemos a pensar cómo serían nuestros caminos si nunca nos hubiésemos arriesgado a postularnos a una residencia o ingresar a estudiar Medicina, con seguridad creemos que sentiríamos, todos, sin excepción, que una parte de nuestra vida no fue vivida por completo. Por eso, eventos como el Congreso Nacional de Residentes de Pediatría enriquecen aún más este camino maravilloso hacia el ser pediatras y le añaden una ‘chispa’ de vitalidad y creatividad a esta experiencia.
Agradecemos a la Sociedad Colombiana de Pediatría por brindarnos estos espacios en pro de fortalecer nuestros conocimientos de manera didáctica, con un único objetivo que es en beneficio de los niños, niñas y adolescentes, nuestra mayor inspiración.
Universidad de Antioquia
Universidad de Cartagena
Universidad Pontificia Bolivariana
